20.04.2021  BOE | INE | Elaboración propia

Las mascarillas en interiores no desaparecerán totalmente. Tras 700 días de pandemia, la población general se ha habituado a su uso, y además Sanidad en su regulación recuerda que los grupos de mayor vulnerabilidad deben tener en cuenta su protección individual.

De acuerdo con lo publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado, el Real Decreto 286/022, la reducción de medidas propuesta para la población general se debe valorar a nivel individual de acuerdo con la pertenencia a grupos de mayor vulnerabilidad, la vacunación y la actividad y comportamiento social que pueda incrementar los riesgos de transmisión.

En este sentido, se recomienda para todas las personas con una mayor vulnerabilidad ante la infección por Covid-19 que se mantenga el uso de mascarilla en cualquier situación en la que se tenga contacto prolongado con personas a una distancia menor de 1,5 metros.

Con la evidencia científica disponible, el Ministerio de Sanidad ha definido como grupos vulnerables para Covid-19 las personas con “enfermedad cardiovascular, incluida hipertensión, enfermedad pulmonar crónica, diabetes, insuficiencia renal crónica, inmunodepresión, cáncer en fase de tratamiento activo, enfermedad hepática crónica severa, obesidad mórbida embarazo y mayores de 60 años”. Tan sólo teniendo en cuenta patologías cardiovasculares, a las embarazas y a la población mayor, estamos hablando de más de 21,5 millones de personas.

El sentido común nos invita a tener en cuenta factores como la ventilación y la afluencia de personas en un lugar a la hora de decidir si llevaremos mascarillas o no. Por ejemplo, aunque en andenes de metro o trenes no sea necesaria, por responsabilidad individual la foto de la jornada de hoy refleja que la inmensa mayoría de personas siguen usándola.